El falso fotógrafo de guerra Eduardo Martins ha llevado a renombradas compañías de medios alrededor de la nariz con fotos robadas. Publicaciones renombradas y agencias de fotografía como Getty Images, Vice, BBC Brasil y The Wall Street Journal han sido puestas a prueba por una audaz trampa – y con ellas unos 120.000 seguidores de Twitter y cerca de 60.000 usuarios de Instagram.
El estafador pretendía ser Eduardo Martins en los medios sociales, un apuesto fotógrafo de guerra de Brasil al que le gusta surfear en su tiempo libre.
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Historia de Eduardo Martins
Fue abusado sexualmente cuando era niño y había golpeado a la leucemia cuando era adolescente, al menos eso es lo que nos cuenta la desgarradora historia de fondo de 32 años de edad. Martins viajó a las zonas de crisis de Oriente Medio y sus fotos fueron compradas por Getty Images o publicadas en el Wall Street Journal – hasta que la BBC Brasil se enteró en investigaciones de que Eduardo Martins no existe.
Manipulación de fotografías
Durante años, alguien había estado fingiendo ser Eduardo Martins, construyendo cuidadosamente una imagen adecuada en los medios sociales y robando imágenes de fotógrafos profesionales que habían arriesgado sus vidas en las zonas de crisis de este mundo. Martins había guiado a periodistas y editores de fotografía manipulando las imágenes robadas. Esto fue suficiente para evitar ser expuesto por algoritmos que supuestamente detectan plagios de imágenes. Por ejemplo, él reflejó algunas de las fotos del fotógrafo estadounidense Daniel C. Britt.
El fraude de Martin no fue reconocido y la lista de sus prestigiosos clientes siguió creciendo. Cada publicación conocida contribuyó al hecho de que el fotógrafo de guerra equivocado pudo vender más fotos robadas. Para mantener su imagen falsa, ocasionalmente concedió entrevistas para sitios web y revistas o manipuló su cara con fotos del artista británico Max Hepworth-Povey, que luego utilizó en los medios sociales como su propio yo.
El fraude tecnológico
El fraude de Martin fue revelado cuando se puso en contacto con la corresponsal brasileña de la BBC Natasha Ribeiro en el Medio Oriente. Se sorprendió porque ni ella ni ningún otro periodista brasileño de la región había conocido personalmente a un tal Eduardo Martins. Así que Ribeiro y sus colegas decidieron llegar al fondo del asunto. La ONU, para la cual Martins afirmaba estar trabajando, confirmó que no había ningún Eduardo Martins trabajando para la organización. Otras organizaciones que él ni siquiera había oído hablar de él, tampoco lo había dicho.
El compañero de la entrevista jugó trucos en Martins a través de Skype. Al principio de la conversación mostró un pequeño video del surfista Hepworth-Povey, que había robado a través de un truco y luego afirmó que la conexión era mala para que usted continuara sin transmisión de vídeo.
Hackers y dinero
Después de que la BBC Brasil tuvo que darse cuenta de que el canal había sido hackeado por un estafador, la empresa de medios se disculpó con sus lectores y sacó todos los artículos relevantes fuera de línea. Quién está detrás de Eduardo Martins todavía no está claro. El falso fotógrafo ha borrado todas las cuentas de medios sociales y supuestamente dejó Australia.